¿Es 2025 el año de la normalización monetaria?

La política monetaria, agitada por la inflación, vive un vaivén continuo. Mientras en EE. UU. se esperan reducciones de los tipos, en Europa se pronostican bajadas que pueden convertir el área en una ‘zona neutral’. Por el momento, Japón es la gran excepción de los mercados.

El 1 de enero de 2020 ningún economista hubiera apostado ni un céntimo de euro a que tres años y seis meses después los tipos de interés estarían en el 4,5% en Europa y en el 5,5% en EE.UU. Quizá tampoco hubieran apostado a que la causa de ello estaría en una inflación tan alta como la registrada en los años ochenta. La política monetaria ha vivido –y vive, de hecho– en una montaña rusa continua desde que dio comienzo la presente década. Tras aproximadamente nueve años de tipos prácticamente estáticos en Europa, la coctelera se ha movido con fuerza. Pero ¿habrá normalización monetaria en 2025? ¿Es la misma situación en todas las geografías?

EE.UU., ¿tipos por debajo del 4%?

Estados Unidos inició una senda de subidas de tipos en marzo de 2022 y la terminó en el verano de 2023, cuando ancló los tipos en el 5,5%. La principal razón de la subida es la lucha contra una inflación galopante que superó el 9% en algunos tramos. Los tipos altos fueron ayudando a que la inflación comenzase a descender paulatinamente y la Reserva Federal esperó a septiembre de 2024 para aprobar el primer recorte. Después llegaron dos más y los tipos se posaron en el 4,25%.

Este año ha comenzado siendo caótico y volátil. La llegada de Donald Trump a la presidencia de EE.UU. y sus anuncios de aranceles han agitado tanto el mercado que al inicio de año se esperaba uno o ningún recorte. Ahora (y esto cambia prácticamente cada semana), el consenso espera que el año termine con unas tasas entre el 3,25% y el 3,75%. Eso serían entre dos y cuatro reducciones aprobadas en las próximas seis reuniones de la Reserva Federal (Fed) para este curso. La inflación, que sigue en el rango de entre el 2% y el 3%, y el crecimiento económico, más mermado por el conflicto comercial, tendrán la última palabra.

Europa, ¿tipos por debajo del 2%?

La historia reciente de la política monetaria del Banco Central Europeo (BEC) está marcada por el mismo son que la de Estados Unidos. Esto es, una inflación galopante que llevó al organismo a subir los tipos del 0% al 4,5% en poco más de un año. Ahí se quedaron desde 2023 hasta el verano de 2024, cuando el BEC se adelantó a la Fed para reducir las tasas.

Desde entonces, en Europa la premura ha sido mayor y se han reducido hasta seis veces los tipos para dejarlos en el 2,4%. Ahora, algunas de las principales casas de inversión del Viejo Continente, como Amundi, DWS o Rothschild & Co pronostican que el año terminará con terminal rate del 2% o, incluso, del 1,75%. Si esto se confirma, los tipos pasarían de estar en una zona ‘restrictiva’ a una zona ‘neutral’ por primera vez en tres años.

Japón, continúan las subidas

La política monetaria de Japón se ha caracterizado, en la última década, por ser increíblemente laxa. De hecho, los tipos llevaban por debajo del 0,3% desde 2008 e incluso llegó a tener períodos con los tipos en negativo. Ni siquiera la pandemia o los movimientos de la Fed o del BCE alteraron su hoja de ruta. Japón siguió inalterable hasta que la inflación empezó a elevarse por la subida generalizada de los salarios en el país nipón.

De hecho, en marzo de 2024 aplicaron la primera subida de tasas, la segunda llegó en el mes de julio y la tercera se produjo este mismo mes de enero. Tres aumentos que han llevado los tipos al 0,5%, su nivel más alto desde 2008. Pero, estos aumentos parece que no se quedarán aquí, según recoge Trading Economics, el consenso estima un tipo del 1% para 2026.

Suiza, ¿regreso a las tasas negativas?

El movimiento del Banco Central de Suiza se asemeja más al de la Fed y el BCE que al de Japón. Los tipos se encontraban, de hecho, en el -0,25% en junio de 2022 y ascendieron al 1,75% un año después. Sin embargo, no fue hasta 2024 cuando comenzaron a descender y, después de cinco recortes, el nivel actual de las tasas se encuentra en el 0,25%.

¿Qué podemos esperar para los próximos meses? Según recoge Swiss Banking, para finales de este mismo año las tasas se situarán en niveles del 0% o que, incluso, vuelvan a estar en un territorio negativo.

Suiza, una fórmula magistral

Suiza tiene la receta perfecta para mantenerse en el podio como capital financiera e ir más allá. La tradición, innovación y sofisticación de su banca privada es un polo de atracción para la inversión.

Latam, recortes a la vista

En América Latina la dinámica en los tipos de interés, salvo excepciones como Argentina, ha llevado a los países a mantener o reducir las tasas durante el 2024. Mientras Chile o Brasil han ido recortando las tasas, México o Argentina las aumentaron y otros, como Colombia, las mantuvieron.

Para 2025, el FMI apunta a que el crecimiento para Latinoamérica será del 2,5% y que la inflación irá bajando gradualmente desde los máximos alcanzados tras la pandemia. En el caso de México, se espera que los tipos se sitúen en el 7,75% para finales de este año y en el 7% en 2026 desde el 11,25% que tenían en 2023. En el caso de Brasil se prevé que los tipos de interés se eleven, aunque no se descarta que puedan producirse algunos recortes a finales de año si la desaceleración del país es clara.

Mercados emergentes, entre la estabilidad y los descensos

En los mercados emergentes también se encuentran algunas disonancias. En China, tras varios recortes en los tipos, el Banco Popular de China ha mantenido las tasas estables. Pero, esto podría cambiar a finales de año, ya que el propio organismo ha abierto la puerta a la llegada de algún recorte. Por el momento, la estabilidad seguirá siendo la tónica.

Por su parte, India inició un camino de subida en las tasas en 2022 para dejarlas en el 6,5% hasta enero de 2025, cuando aplicaron el primero de los recortes. Después, han llegado varios más y los tipos se posan en el 6% actual. La expectativa señala que para 2026 el nivel estará en el 5%.

En definitiva, en estos momentos la gran excepción de los mercados más grandes parece ser Japón que camina hacia un tipo de interés del 1%. Mientras, el resto de los mercados se dirigen a una política monetaria más flexible y normalizada, que podría acelerarse en función del impacto de la guerra comercial.

Suiza vs Japón, la batalla oculta

Debido a que Japón ha mantenido los niveles de las tasas ultra bajos durante muchos años, el yen japonés se convirtió en una divisa fundamental para hacer carry trade. Los inversores lo pedían prestado para invertir en activos de mayor rentabilidad. Sin embargo, las subidas de las tasas y los recortes de estas por parte del Banco Nacional Suizo ponen ahora al franco suizo como una de las divisas más atractivas para realizar esta estrategia asociada al mercado de divisas. Este cambio podría presionar a la baja al yen y fortalecer al franco suizo.